Introducción
La narración digital para la transformación (NDT) es un proceso audiovisual participativo y creativo que ayuda a las personas a contar una historia personal a través de un proceso colectivo. Utiliza tecnología digital para comunicar y amplificar esta historia. Una historia digital es una breve secuencia de dos o tres minutos compuesta por imágenes estáticas que se preparan y se cuentan conscientemente como narración en primera persona, desde el corazón. Las herramientas y los métodos aplicados al proceso de NDT han evolucionado en los últimos diez años, como una forma de trabajar estrechamente con diferentes grupos de personas con el fin de obtener una comprensión más profunda de las múltiples y complejas formas en que las vidas de las personas se ven afectadas por los problemas sociales más relevantes para ellos. El proceso se realiza con la intención de desarrollar nuevos conocimientos, habilidades y confianza en sí mismos para los narradores, y de establecer conexiones entre los narradores que participan juntos en el mismo proceso.
Family for Every Child inició un proyecto de NDT en 2014 para permitir que nuestras organizaciones miembros desarrollen películas con niños, padres y cuidadores que brinden información valiosa sobre el cuidado en la familia o fuera de ella. Why Family Matters to Me (“Por qué me importa la familia”) se publicó en 2016 para compartir los resultados de las películas producidas. El informe se centró en: los tipos de familia, y las familias como fuente de amor, afecto, apoyo e identidad, así como de discriminación, violencia, abuso y abandono.
La segunda fase del proyecto comenzó en 2016. Participaron en el proyecto cinco miembros, de Colombia (Taller de Vida), Guatemala (CONACMI), Indonesia (Muhammadiyah), Ruanda (Uyisenga Ni Imanzi) y Zimbabue (FOST), que comenzó con un taller residencial de cinco días para la formación de instructores. Durante esta capacitación, los participantes aprendieron a producir una historia digital ellos mismos para adquirir experiencia práctica y personal con el poder transformador y terapéutico de la herramienta, reflexionaron sobre la familia en su contexto, y estudiaron y desarrollaron el protocolo ético para la investigación. El protocolo ético incluyó procesos para obtener el consentimiento para la participación en las películas y el uso de ellas, una evaluación de riesgos y el protocolo para tomar cualquier acción urgente necesaria para salvaguardar a los participantes, con una discusión sobre escenarios posiblesu.
Se realizaron 55 películas, de las cuales 33 fueron realizadas por niños (19 niñas y 14 niños). El 70% de los niños que participaron en el proyecto vivía con sus padres, mientras que el 30% restante vivía con sus familiares. Las películas restantes fueron realizadas por adultos que eran padres o cuidadores, jóvenes que habían participado en el trabajo de los participantes como niños, o personal de las organizaciones miembros. Para este informe, las películas de los jóvenes fueron analizadas junto con las de los niños; las películas de los miembros del personal no han sido incluidas en el análisis.